MOVIMIENTOS DE RENOVACIÓN PEDAGÓGICA

CEIP TRABENCO

El CEIP Trabenco se inauguró en la década de los setenta (1972), sobre la misma fecha en que nacieron los Movimientos de Renovación Pedagógica (MRPs). Desde entonces es un colegio puntero en la innovación pedagógica. Han puesto en práctica un modelo educativo donde una de las premisas esenciales es: el colegio es una comunidad, donde los protagonistas, alumn@s, profesor@s y familias, participan de forma activa. El objetivo del colegio se orienta a conseguir una formación integral de los escolares, un constante desarrollo profesional de los maestros, y una elevación cultural y humana del barrio en el que se establece el Centro.

Su propósito consiste en crear proyectos educativos singulares que valoran la investigación e innovación educativas y la educación en valores como señas de identidad.

Sus objetivos me han parecido muy interesantes, y voy a señalar algunos de ellos:

- Formar personas con recursos, autónomas, con mentes curiosas, reflexivas, capaces de aprender por sí mismas.

- Desarrollar prioritariamente los contenidos relacionados con valores y actitudes sobre los puramente académicos, con especial hincapié en el valor del grupo y en el respeto a la diferencia. 

- Establecer mecanismos organizativos compartidos, colaborativos, negociadores, abiertos y críticos entre padres/madres y profesorado.

- Potenciar una escuela abierta que suponga vivenciar el entorno natural y social y el establecimiento de relaciones con estas realidades. 

En mi opinión, este tipo de colegios está dando un muy buen ejemplo a toda la comunidad educativa; el hecho de que se hayan planteado cambiar ciertos aspectos para favorecer a todos supone un gran avance. El colegio Trabenco es un ejemplo de tantos que intentan mejorar la situación educativa, y me han parecido muy interesantes sus principios de identidad, que incluyen: una libre expresión y creatividad; una actitud crítica; responsabilidad y solidaridad; valoración de la diversidad; aprendizaje investigando; y una gestión democrática y participativa.

Así, todos forman parte de la educación, todos tienen derecho a expresar sus opiniones y a que sean tenidas en cuenta, se lleva a cabo un aprendizaje donde los alumnos son los protagonistas, y se consigue finalmente una escuela para tod@s, con igualdad de oportunidades, y que apuesta por la cooperación, la convivencia, el respeto, la solidaridad y la libertad.